miércoles, 22 de mayo de 2013

Tengo una duda


En esta vorágine de personas andamos buscando siempre. Esa necesidad del ser humano de estar dentro y pertenecer a algo. Bien dijo Julio: "Andábamos sin buscarnos pero sabiendo que andábamos para encontrarnos. Oh Maga, en cada mujer parecida a vos se agolpaba como un silencio ensordecedor, una pausa filosa y cristalina que acababa por derrumbarse tristemente, como un paraguas mojado que se cierra." Ahora, la pregunta del millón, ¿realmente están los hombres listos para encontrar las mujeres que circulamos hoy?
Porque ya no tenemos dentro de nuestro currículum “cocinar”, “planchar”, “cuidar niños/as”. Muchas ya no tenemos como prioridad ser amas de casa, nos interesa la libertad, la intelectualidad. Amamos nuestra carrera y departir con amigos. En lo particular, deseo mucho más ser yo misma antes que ser “de” alguien. Las mujeres que me rodean ya no son la Susanita de Quino que paren a diestra y siniestra (según lo que Dios me dé). Ya no.
La ciencia, la historia, las leyes nos han absuelto de seguir patrones que ya no casan con nosotras. Nos permiten decidir qué hacer y que no. Por eso, al próximo que venga podré preguntarle: ¿Estás seguro? Porque aunque las aves vuelan en bandada el vuelo siempre es personal.